Covid salud mental estado de alarma

Pacientes de salud mental durante la crisis del Covid-19: un grupo de riesgo olvidado

La crisis social generada por el virus Covid-19 ha conllevado el establecimiento de medidas extremas por parte de los estados para controlar la expansión del virus. En España, el estado de alarma declarado el 14 de marzo ha impuesto importantes restricciones que limitan la cotidianeidad de las personas. En concreto, el confinamiento en los hogares es una de las medidas que podrían tener efectos psicológicos notables.

Entre las cuestiones que pueden influir en esta evolución, están factores específicos del estresor: duración, impredecibilidad y nivel de repercusión, entre otros. En la situación actual, los factores implicados son múltiples y carecemos de referencias para poder cuantificar su impacto.

Una situación de carácter traumático

Nuestro cerebro está sufriendo estrés postraumático, en un grado u otro, en función de la capacidad individual y de la experiencia previa y los mecanismos que utilicemos para que esta situación se vaya integrando. El cerebro reacciona desde el sistema reptiliano ante este tipo de situaciones inesperadas, súbitas y traumáticas, y una de las funciones que tiene ese sistema es, a veces, desconectarse para atacar o correr, o congelarse realizando conductas agresivas, pasivas o drásticas de manera automática.

En muchas personas esta situación estresante va a conectar con experiencias similares anteriores no resueltas. En consulta hay a quien la situación de estar en casa “encerrados” les está precipitando recuerdos infantiles de castigo, de miedo y de pérdida de libertad. Otras personas más mayores están recuperando recuerdos narrativos de sus abuelos que vivieron en la guerra y afrontaron momentos de extrema necesidad.

Las noticias sobre la situación de enfermedad y muerte pueden estar resurgiendo recuerdos acerca de enfermedades previas o duelos no resueltos. Estos ejemplos sirven para clarificar que muchas de las emociones que estamos experimentando tienen su origen en el pasado traumático y no se justifican únicamente por lo que vivimos ahora. Por tanto, cuantos más traumas no resueltos asociados al estrés de esta situación tengamos, más probabilidad de estar sufriendo en estos momentos.

Personas con mayor  vulnerabilidad

Se habla de grupo de riesgo para contraer el virus, pero a los profesionales de la salud mental también nos interesa tener en cuenta a las personas con vulnerabilidad psicológica y/o psiquiátrica cuya situación va a provocar una agudización de los síntomas, descompensaciones y aparición de trastornos comórbidos futuros.

Como es una situación sin precedente, no tenemos estudios previos que nos indiquen a nivel psicopatológico las secuelas de esta realidad. Por ello, de momento solo nos queda identificar a los grupos vulnerables para estar atentos y reducir las consecuencias que puede llegar a producir en estas personas la situación de confinamiento.

Los profesionales de salud mental nos estamos encontrando con personas que buscan ayuda por descompensación de sus síntomas. Pacientes con trastornos psicóticos que mantenían estabilidad en los últimos tiempos están ahora elaborando delirios relacionados con esta situación de alarma con implicaciones políticas, económicas y sanitarias. El confinamiento está exarcebando las especulaciones.

Las personas que tienen dificultad para regular impulsos como los trastornos de personalidad, algunos trastornos alimentarios, dependencia de sustancias, etcétera, también están comenzando a pedir ayuda pues encuentran más dificultad para autocuidarse, gestionar la ira o usar su mente reflexiva. Comienzan a realizar conductas que alivian de inmediato la sensación de malestar, aunque a la larga sea autodestructivo para ellas. Otros sufren efectos de abstinencia por no encontrar la sustancia que consumen habitualmente.

Aquellos con trastornos de ansiedad previo, del tipo trastornos de pánico, están sintiéndose sobrepasados, experimentando la sensación de peligro continua y necesidad de “huir”. Las personas con rasgos de ansiedad generalizada tienen un sinfín de nuevas preocupaciones con las que rumiar constantemente, alejándose del contacto con la realidad presente y experimentando síntomas desagradables como palpitaciones, insomnio u opresión en el pecho.

Las ideas autolíticas así como las ideas pasivas de muerte puede que también sufran un aumento con el paso de los días pues la sensación de indefensión y los pensamientos de impotencia de las personas con tendencias depresivas favorecen los pensamientos de desesperanza. Estos pacientes tendrán dificultades para ayudarse echando mano de creencias positivas y racionales como que “esto es temporal y que volveremos a nuestra vida normal”, y se quedarán ancladas en pensamientos catastrofistas que puede que nunca lleguen a cumplirse.

Las personas con problemas psicosomáticos de índole digestivo, dermatológico o de dolor expresarán mediante el cuerpo el estrés psíquico al que están sometidos. Las que tienen rasgos hipocondríacos es posible que se encuentren sobrepasados por la posibilidad de enfermar.

Estos solo son unos ejemplos. El otro problema añadido es que estas personas que están sufriendo conviven con familiares que tienen la energía mínima imprescindible para regularse y cuidarse a sí mismos. Ahora no pueden contener como lo hacía antes. Por estos motivos estamos recibiendo a muchas personas que encuentran serias dificultades en la convivencia en casa debido a la aparición de conflictos con sus familiares que no pueden ni saben gestionar. Por tanto, mientras que antes el problema psicológico lo padecía una persona, ahora forma parte de toda la familia.

La importancia de pedir ayuda

Los profesionales de la salud mental estamos volcados en estudiar e investigar las repercusiones de este fenómeno en el estado psicológico de las personas con y sin patología previa. Y, sobre todo, estamos implicados desde nuestro campo de actuación en contribuir y ayudar a la población a gestionar mejor esta crisis.

Desde la clínica de salud mental SAMU Wellness estamos formados y preparados para dar respuesta a las personas que acudan a nosotros. Mediante intervenciones telemáticas, para evitar la transmisión del virus, ofrecemos sesiones con nuestros pacientes externos, y con aquellos que, aunque fueron dados de alta y ya mantienen estabilidad clínica, desean consulta y recibir algunas indicaciones para manejar mejor esta situación.

Autora: Ana García-Dantas.

Psicóloga Especialista en Psicología Clínica

 

Comida navidad SAMU

Así fue la comida de Navidad de SAMU

El Real Círculo de Labradores de Sevilla fue el escenario de la fiesta de Navidad de SAMU 2019, una jornada festiva y de confraternización de toda la organización que se consolida año tras año y que, en esta edición, contó con la participación de más de 250 compañeros llegados de todos los puntos de Andalucía y del país. Junto al Guadalquivir, se sirvió un cóctel amenizado con música para todo el equipo que se alargó, en algunos casos, hasta entrada la noche.

Carlos González de Escalada, director general de SAMU, agradeció a todos los compañeros su presencia para disfrutar de esta jornada de amistad y distensión después de un año, en ocasiones, “convulso”. “Todo lo que conseguimos es posible por vosotros. Sois un equipazo”, enfatizó el director general.
Durante la fiesta, se hizo un reconocimiento a los centros que más han destacado en la reciente campaña de recogida de kilos de comida para el Banco de Alimentos, que se ha saldado con casi una tonelada, con el liderazgo de los centros de La Cartuja (85 kilos), Santa Ana (86) y, de forma destacada, por el centro de menores de El Bosque (522), cuyo equipo se ganó un jamón ibérico como premio por su esfuerzo y lo celebró a lo grande en el salón del Real Círculo de Labradores.

Carlos Álvarez Leiva, fundador de SAMU, recordó como en 2007 recibió una llamada de la Junta de Andalucía solicitando la ayuda de la organización para atender a los menores que estaban llegando de forma masiva a las playas de Motril. “Aquello significó un gran reto para la familia SAMU. Fue el principio del camino que nos lleva hasta la posición de enorme responsabilidad que ocupamos hoy”, apuntó.

Álvarez Leiva dirigió la entrega de reconocimientos a personas que han destacado por su labor en cada una de las áreas de la organización, y brindó con todo el equipo: “Todos tenemos una familia de sangre, de la que estoy muy orgulloso, y otra familia que es la que te vincula a la vida y a la tierra. Ambas están cargadas de emociones y sentimientos, y hoy todos vosotros formáis parte inequívoca de esa familia. Os deseo lo mejor. Buscad la felicidad interior bruta: será la única manera de hacer felices a las personas con las que trabajamos”.

Ampliación de SAMU Wellness

La valiosa cosecha de SAMU Wellness

La clínica de salud mental SAMU Wellness se supera a sí misma y continúa creciendo para dar una respuesta modulada a una demanda creciente a través de la ampliación de sus instalaciones y reordenando los espacios existentes, que se han dotado con multitud de recursos terapéuticos.

En el verano de 2017, esta clínica de atención integral a la salud mental abría sus puertas en Montequinto (Dos Hermanas, Sevilla), con un equipo interdisciplinar de profesionales que se ha triplicado en dos años, entre psiquiatras, psicólogos, médicos generalistas, enfermeros especializados en salud mental, trabajadores sociales, fisioterapeutas y nutricionistas.

La gran diferencia entre SAMU Wellness y el resto de clínicas y hospitales psiquiátricos es que SAMU Wellness ofrece al paciente una atención integral con las terapias más actuales y lucha contra la idea de la estigmatización de los trastornos mentales.

“Nosotros trabajamos bajo el concepto de comunidad terapéutica. Todos los elementos personales, materiales, normativos y estructurales del centro que rodean al paciente son concebidos como agentes terapéuticos e intervienen en el desarrollo psicológico del paciente. SAMU Wellness no es un hotel psiquiátrico ni una residencia mental al uso basada en tratamientos individualizados. El propio centro es el principal instrumento terapéutico para el paciente y esto lo hace único”, destaca el doctor Zoilo Fernández, psiquiatra y director técnico de SAMU Wellness.

Dada la alta demanda, SAMU Wellness ha ampliado sus instalaciones y se han generado zonas para el desarrollo individual de las actividades de la vida diaria. Actualmente, se trabaja en la puesta en funcionamiento de una vivienda tutelada anexa a la clínica.

“La incorporación de nuevos profesionales ha permitido reforzar nuestras capacidades sobre todo en el área de hospital de día, además de mantener los tratamientos especializados en trastornos de la alimentación, terapias grupales, talleres ocupacionales, etcétera”, comentan desde la dirección del centro, que cuenta en la actualidad con 70 profesionales.

SAMU Wellness tiene capacidad para atender a 60 pacientes, 30 de ellos en régimen de atención continuada y el resto en hospitalización de día, la cual está teniendo gran aceptación entre las familias. “En los dos años de vida de SAMU Wellness hemos observado una demanda creciente y acorde al conocimiento que se ha tenido de nuestro centro. Nuestro índice de ocupación medio alcanza el 80% con más de 5.000 ingresos de hospitalización”, señala la dirección de SAMU Wellness.

“El Hospital de día es uno de los exponentes referenciados que mayor aceptación tienen con unos programas individualizados desarrollados preferentemente en espacios al aire libre”, indica la dirección del centro.

En la clínica de salud mental SAMU Wellness no sólo se atiende a los pacientes, también a sus familiares y cuidadores, y dentro de la cartera de servicios de SAMU Wellness destaca la atención a los familiares de los pacientes como eje principal del proceso de asistencia integral.

Hogar San Lázaro SAMU Tenerife

El Hogar San Lázaro reabre sus puertas gracias al impulso de la Fundación SAMU

SAMU Hogar San Lázaro, centro especializado en Santa Cruz de Tenerife en atención a pacientes con discapacidad intelectual y/o trastorno mental grado 1 y 2, ha reabierto sus puertas tras hacerse la Fundación SAMU cargo de su titularidad, después de las circunstancias personales que obligaron a los anteriores responsables a decretar su cierre, dejando desasistidos a 16 pacientes.

Actualmente, SAMU Hogar San Lázaro puede acoger de manera inminente de 16 a 18 usuarios, y, además, está a la espera de recibir la acreditación del concierto de plazas con el gobierno de Canarias. El proyecto está avalado por la experiencia y fiabilidad de SAMU Wellness, entidad de referencia a nivel nacional en salud mental y bienestar emocional.

Después de reunirse hace unas semanas con el diputado del Común, con el ánimo de desbloquear la situación, la Fundación SAMU se comprometió a hacerse cargo del centro, en el que ha realizado una inversión de 20.000 euros destinada a remodelación de la sede y mobiliario nuevo para adaptar las instalaciones a las necesidades de los usuarios.

El perfil del paciente de SAMU Hogar San Lázaro es el de personas adultas dependientes (grado I y II -Ley 29/2006) con discapacidad intelectual y/o trastorno mental con edades comprendidas entre 16 y 64 años, de gran autonomía, sin necesidad de apoyos médicos constantes y que no tenga trastornos de conducta o personalidad graves. Es decir, que precisan de ayuda, control y supervisión en el desarrollo de las actividades de la vida diaria (alimentación, higiene, tratamiento y desarrollo personal) y que no pueden ser atendidos por sus familias o tutores por cualquier tipo de circunstancia.

Con este nuevo proyecto, SAMU implanta en este centro un nuevo modelo asistencial para la salud en Tenerife centrado en las personas, con el objetivo de dar apoyo en la normalización e integración social, la mejora de la autonomía personal y la potenciación de las habilidades sociales. Este modelo se caracteriza principalmente por la continua colaboración con equipos de salud mental, telemedicina, vida normalizada, apoyo de las familias, convivencia y desarrollo personal a través de excursiones y saludas, integración comunitaria y calidad asistencial. Para ello, SAMU Hogar San Lázaro cuenta con una experimentada plantilla de cuidadores que trata cada caso de manera especializada apoyado a través de la telemedicina por un diverso equipo de profesionales compuesto de psiquiatras, psicólogos, terapeutas ocupacionales y colaboraciones con equipos privados de psiquiatría en Tenerife.

SAMU, a través de su Fundación, cuenta con una amplia experiencia en atención a personas con discapacidad desde hace más de una década a través de varios centros especializados: Residencia Santa Ana (Sevilla), Residencia San Sebastián (Cantillana, Sevilla), Residencia Santa Teresa (Villafranca de los Caballeros, Toledo), UED San Lucas (Sevilla), y Centro El Alfar (Gijón. En cuanto a las cifras propias de SAMU, es pionero en España en el sector salud, acción social y emergencias, en el que acumula 37 años de experiencia. Tiene 52 centros de trabajo en 8 comunidades autónomas y presencia internacional en Marruecos y Estados Unidos, cuenta con una plantilla de más de 1250 profesionales y ha formado a más de 11.000 alumnos en salud y emergencias.

Entrevista Yolanda Abreu Samu Wellness

“En SAMU Wellness el paciente es coterapeuta”

Yolanda Abreu (Caracas, Venezuela, 1991) llegó a España en junio en busca de un futuro para su hija dada la situación económica y política de su país natal. Médica en SAMU Wellness, Abreu participa en el programa de talleres terapéuticos del centro.

—¿Por qué decidió emigrar a España?
—La situación en Venezuela era insostenible. Tuve una hija y era muy difícil conseguir pañales o medicamentos. Yo trabajaba en un hospital en muy malas condiciones. Había fugas de agua; pasaba consulta sin luz, con la linterna del móvil y, en las guardias, no se podían usar los baños porque estaban sin agua, sin luz, sin un mantenimiento mínimo. Me cuestioné seriamente si quería seguir en el país bajo esas condiciones y más aún teniendo una bebé. ¿Qué futuro quería darle a ella?
—¿Tiene familia en España?
—Sí, mi hermana vive en Barcelona desde hace un año. Fue ella la que me animó y me motivó a dar el paso.
—¿Cuál es la situación actual en Venezuela?
—Peor que cuando yo me vine. Cada vez hay más desabastecimiento. El problema de Venezuela es que el sueldo mínimo no alcanza para absolutamente nada y las personas sobreviven gracias a lo que le mandan familiares y amigos desde el extranjero. Yo, por ejemplo, envío dinero y medicamentos a mis padres, que viven allá. Pero, aunque tengas el dinero, a veces no puedes comprar lo que necesitas porque no hay. Cuando vivía allá, viajaba a Argentina, de donde es mi marido, y hacíamos acopio de todo lo que podíamos necesitar, como pañales, ropa o medicinas.
—¿Cómo era trabajar en un hospital público en Venezuela?
—El hospital en el que yo trabajaba no tenía ningún tipo de infraestructura. Yo llegaba y, literalmente, me mojaba las piernas hasta las rodillas de agua.  Trabajaba en el departamento de psiquiatría, con pacientes difíciles, algunos incluso agresivos, y no había luz. Los enfermeros administraban los medicamentos a los pacientes en absoluta oscuridad. Y a la hora de indicar un tratamiento, a veces no podías recetar el mejor fármaco porque el paciente no tenía modo de conseguirlo ni en Venezuela ni en el extranjero. Acababas recetando el medicamento que había en la farmacia aunque sabías que no era el mejor para el paciente.
—¿Se arrepiente de haber emigrado?
—En absoluto. Siento nostalgia y echo de menos a familiares y amigos, pero acá tengo una calidad de vida que en Venezuela no hubiera podido tener. En mi país también hay mucha inseguridad. Ya te matan para robarte el móvil. A mí me daba miedo ir al parque sola con mi hija. Al final acabas aislándote y encerrándote en casa.
—Hace unos cinco meses que trabaja en la clínica de salud mental SAMU Wellness. ¿Cuál es su papel aquí?
—Soy parte de la comunidad terapéutica del centro y trabajo en el área de consultas externas. Una parte muy importante del trabajo que se hace aquí son los talleres y terapias ocupacionales. Hay de muchos tipos, educativos, estimulación neurocognitiva, arteterapia o educación sobre psicofármacos, que es uno de los que llevo yo.
—¿En qué consiste este último taller?
—El taller de educación sobre fármacos consiste en ofrecer a los pacientes información sobre los medicamentos, cómo funcionan, qué hacen, sus efectos adversos y beneficios, además de resolver sus dudas sobre los diferentes tratamientos. El objetivo es que el paciente tome consciencia de la importancia que tiene seguir el tratamiento. A veces, los pacientes se niegan a tomar el tratamiento y ésta es una de las principales causas de una recaída, descompensación o que el paciente no responda como se espera.
—¿Cómo benefician los talleres terapéuticos a los pacientes?
—Una de las señas de indentidad de SAMU Wellness es la comunidad terapéutica. Se trabaja en equipo, codo con codo, aunque las especilidades sean distintas, y los pacientes también participan en la recuperación de otros pacientes, se ayudan unos a otros. El paciente es coterapeuta y esto le permite conocer los problemas de otras personas, ponerse en su lugar y ver su propio problema desde una perspectiva distinta. Al ayudarse unos a otros se dan cuenta de que no están solos.
—¿Cuál es el perfil de sus pacientes?
—Es muy diversos, pero, muchos de los pacientes que trato padecen depresión, ansiedad, trastornos por  consumo de sustancia y episodios psicóticos, que, a su vez, derivan en otras patologías y problemas.
Hogar San Lázaro SAMU Tenerife

Abre en Tenerife SAMU Hogar San Lázaro

Fundación SAMU SAMU ha puesto en marcha SAMU Hogar San Lázaro, un centro situado en Santa Cruz de Tenerife que aplica un nuevo modelo asistencial para la salud mental, con el aval de SAMU y de SAMU Wellness. Este espacio tiene como objetivo mejorar la calidad de vida de las personas con discapacidad intelectual y/o trastorno mental y sus familias por medio de una atención integral personalizada.

La residencia Hogar San Lázaro, situada en el barrio de Villa Ascensión, ha funcionado durante los últimos cinco años como centro destinado a las personas con discapacidad psíquica y bajo la gestión de una empresa familiar. Tras el cese de la actividad de la empresa, que dejó en situación complicada a los 16 residentes del centro, Fundación SAMU ha tomado la decisión de poner en marcha este proyecto con una nueva filosofía de trabajo.

SAMU Hogar San Lázaro adopta ahora la tipología de hogar funcional para el alojamiento de usuarios dependientes con discapacidad intelectual y/o trastorno mental, explica Maribel Álvarez Leiva, subdirectora de SAMU Wellness.

Su cartera de servicios está dirigida a usuarios de gran autonomía que precisan de ayuda, control y supervisión en el desarrollo de las actividades de la vida diaria (alimentación, higiene, tratamiento y desarrollo personal) pero que no pueden ser atendidos por sus familias o tutores.
La estructura personal básica del nuevo centro consta de cuatro profesionales de atención directa y un encargado de la coordinación general y servicios generales. Tras la reforma acometida en octubre, este recurso ya está operativo.

Premio Empresa con Alma Samu Wellness

Un premio con alma

El equipo de SAMU Wellness está de enhorabuena tras haber recibido el premio Empresa con Alma, concedido por Grupo ESSAE, por la labor que la entidad realiza en el ámbito sanitario y por su excelencia profesional y humana.

Irene Prieto, directora general de ESSAE, y Carmen de la Cámara, directora de relaciones institucionales, se desplazaron al centro de Miguel de Mañara para proceder a la entrega de este galardón. Subrayaron “el trato humano y el servicio exquisito del centro, tanto al paciente como a sus familiares, que hacen de SAMU Wellness dignos merecedores de este premio”, según la valoración de los alumnos que han realizado las prácticas en el centro.

Maribel Álvarez Leiva, subdirectora de SAMU Wellness, expresó su satisfacción por el reconocimiento y valoró de forma especial el hecho de que sean los propios alumnos en prácticas lo que evalúen el trabajo que realizan sus compañeros día a día. “Es un orgullo y refuerza nuestro compromiso para seguir esta línea de trabajo y mantenernos siempre alerta para mejorar”.

El doctor Zoilo Fernández recogió el galardón, acompañado de Carlos Álvarez Leiva, presidente de Fundación SAMU, y todo el equipo técnico y personal asistencial del centro.

SAMU Wellness tiene un convenio de practicas con la Escuela Superior de Auxiliares y Experto ESSAE con el objetivo de recibir en prácticas a sus alumnos de cursos como auxiliar de enfermería y celador, entre otros.

talleres ocupacionales SAMU Wellness

Talleres ocupacionales: un programa para cada usuario

La clínica de salud mental SAMU Wellness, que abrió sus puertas hace ya dos años en Montequinto (Sevilla), se caracteriza por ofrecer a sus pacientes un programa específico y personalizado, en función de sus necesidades. Para ello, el equipo profesional de la clínica, en primer lugar, observa a los pacientes y se reúne con ellos antes de su ingreso con los objetivos de conocer más sobre su situación y recopilar la máxima información posible sobre ellos. Tras este primer paso, entre todos los miembros del equipo de profesionales se elabora un programa específico que incluya actividades acordes con las necesidades, habilidades, gustos, conocimientos y actitudes del propio usuario.

Algunos de los usuarios que llegan a la clínica SAMU Wellness disfrutan con los programas de voluntariado, y esto permite el fomento de su autoestima y que crezca su motivación.

Unas de las actividades más demandadas son los talleres ocupacionales. Dentro de este programa, el equipo de SAMU Wellness ha puesto en marcha un taller en el que se aborda la sensibilización para la cooperación. Esta actividad consiste en la visita al centro de diversos representantes de entidades que trabajan por y para la cooperación internacional, como la Fundación Vicente Ferrer, que desarrolla una importante labor humanitaria para erradicar la pobreza en la India rural y que ya trabaja con más de tres millones de personas. A estas jornadas también acuden personas que han participado en proyectos internacionales como voluntarios y que relatan sus experiencias.

En SAMU Wellness también se trabaja la superación y la gestión de emociones a partir de historias personales que llegan a los usuarios a través de conferencias, audiovisuales, dinámicas, dramatizaciones o visionado de películas.

Aquí también se cultiva el compromiso con el medio ambiente con la participación del centro en el programa ECOSAMU, dirigido por Rocío Álvarez, directora del departamento de Sostenibilidad de SAMU, que acudió en julio a la clínica dentro del programa de talleres ocupacionales. Durante su visita, Álvarez explicó cómo, a través de pequeñas acciones, podemos cuidar nuestro planeta y qué estrategias podemos implantar para contribuir de forma individual y colectiva a su recuperación.

Otra de las actividades que ayuda al fomento del trabajo en equipo, la autoestima y la motivación de los usuarios son los diferentes talleres al aire libre como el de pintura o el de jardinería. Cada dos semanas, por ejemplo, se realiza un mural conjunto con una temática concreta. El último llevado a cabo tuvo como protagonista el verano. La actividad se realizó acompañada de música estimulante que favorecía la concentración y el bienestar de los usuarios.

El centro, además, cuenta con una  biblioteca y una zona de confort y de descanso que cuenta con responsables que controlan los préstamos y devoluciones de los libros, y todo con un empeño cariñoso para que todo esté en orden, algo que estimula sobre todo a los que les apasiona el mundo de la lectura, fomentando así la autonomía de los pacientes y favoreciendo su recuperación.

Los talleres ocupacionales, que se desarrollan dentro de un marco terapéutico, se elaboran en función de los conocimientos de los pacientes, sus gustos y aficiones. Y en ellos, la música es un elemento muy importante. Como decía el poeta y dramaturgo de la época victoriana Robert Browning, “el que escucha música siente que su soledad, de repente, se puebla”.

En SAMU Wellness creemos importante incluir en nuestros programas las artes como herramientas fundamentales del proceso terapéutico. Desde el cine hasta la música, pasando por el teatro, la poesía, la pintura, la cerámica o la danza. Creemos en la estimulación, en la creación artística dentro de un marco adecuado y, como objetivo, la promoción de dinámicas de transformación que incidan en la capacidad personal y social y el desarrollo expresivo y creativo.

Francisco José Soler, nutricionista SAMU Wellness

Francisco José Soler, nutricionista de SAMU Wellness: “No tenemos consciencia de lo grave que puede ser la obesidad”

Francisco José Soler, nutricionista de SAMU Wellness, es especialista en obesidad y sobrepeso y trastornos de la conducta alimenticia. Nos atiende para explicarnos la relación entre la alimentación y la salud mental, así como la incidencia cada vez mayor de la obesidad y los trastornos de la conducta alimenticia entre chicos y chicas muy jóvenes.

—¿Cuál es la relación entre nutrición y salud mental?
—No existe una relación exacta, aunque a veces se relaciona la salud mental con problemas alimentarios. El caso más concreto es cuando hay un trastorno de la conducta alimentaria. La salud mental está relacionada con la alimentación porque muchas veces los trastornos mentales tienen como consecuencia el comportamiento alimentario.

—¿Una población mejor alimentada es una población con mejor salud mental?
—No tiene por qué. La alimentación forma parte de la vida de las personas, y la sociedad nos marca cada vez más unas pautas que nos alejan de una alimentación correcta y hay más transgresiones alimentarias que van en contra de una mejor salud mental. No hay relación entre salud mental y alimentación, pero cuando nos alimentamos mejor esto influye en la salud general, y lógicamente en la salud mental. El cerebro se tiene que nutrir igual que cualquier órgano. Al final, la salud mental relacionada con la alimentación está más encuadrada con alguna enfermedad psiquiátrica.
Hay nutrientes y elementos, como la vitamina B12, cuya influencia en la salud mental sí está cada vez más clara.
La vitamina B12 es uno de los elementos que hasta ahora no se ha tenido mucho en cuenta, no se le ha dado la importancia que puede tener en un paciente. Se han hecho muchos estudios con veganos y se ha visto una carencia excesiva de B12 cuando no se suplementa la alimentación. Se está encontrando evidencia científica aplastante de la relación entre ciertas enfermedades psiquiátricas con carencia de vitamina B12. Muchas enfermedades de la vejez, como la demencia senil, tienen que ver con falta de B12, por problemas en la absorción de los nutrientes. Son personas que suelen estar peor nutridas y eso puede desembocar en una demencia. En cuanto a enfermedades psiquiátricas, se pueden desarrollar psicosis y alterar muchos neurotransmisores que desembocan en trastornos bipolares o maníacos y en depresiones. Es muy importante. Por eso siempre insisto con pacientes veganos en la importancia que tiene para su desarrollo mental.

—¿Qué otros nutrientes o elementos son importantes para la salud mental?
—No hay estudios concluyentes, pero todo lo que puede alterar la función celular influye en las neuronas, que son las células del cerebro. Esto se traduce en cambios químicos en los neurotransmisores, que cuando se desequilibran tienen como consecuencia la enfermedad mental.

—¿Qué papel juegan los folatos (vitamina B9)?
—No está totalmente demostrado, pero cuando la cantidad de ácido fólico en las células baja mucho (el ácido fólico influye en la actividad sanguíneo) esto puede tener consecuencias neuronales. No hay relación directa, pero un déficit puede influir negativamente en la función neuronal.

—¿Hay relación entre alimentación y depresión?
—Sí. Hay una relación desde el momento en que tu cuerpo no está recibiendo los nutrientes adecuados, y las células neuronales manifiestan ese déficit en un mal funcionamiento. Para tener nuestros neurotransmisores bien regulados necesitamos estar bien alimentados, porque así funciona mucho mejor el cerebro. Una alimentación adecuada incide en el equilibrio neuronal. No obstante, una enfermedad depresiva tiene unos componentes sociales muy acusados. De modo que no cura la enfermedad, pero sí puede ayudar a la curación.

—¿Qué tipo de pacientes suele atender en su consulta?
—En mi práctica habitual tengo dos especialidades, sobrepeso y trastornos de la conducta alimenticia (TAC). La mayor parte, el 90%, es sobrepeso y obesidad, que tiene unos efectos que inciden mucho en la salud mental. Cuando una persona con autoestima baja o depresión empieza a bajar de peso y adquirir hábitos correctos, se ve cómo evoluciona positivamente a un estado anímico más positivo.

—¿Qué trastornos alimenticios encuentra en la práctica diaria?
—Son enfermedades psiquiátricas, y aquí veo anorexias, bulimias… Vigorexias y ortorexias menos veces, pero también me las encuentro. Están muy relacionadas con las formas de vida actuales. Internet y las redes sociales influyen mucho, sobre todo en los más jóvenes, para desarrollar estas enfermedades. Para muchos jóvenes, pertenecer a un grupo es una forma de estar en la sociedad. Pero también son trastornos. Una vigorexia es un trastorno. La ortorexia, igual. La persona se llega a obsesionar con la higiene de un alimento y su manipulación, y la consecuencia es que dejan de relacionarse, se aíslan y acaban con problemas psiquiátricos.

—¿Hay un aumento de la obesidad?
—Sí, todos los estudios detectan mayor número de personas con sobrepeso y obesidad. Es alarmante. Se convierte ya en una pandemia. No tenemos la concepción de enfermedad, como se tiene de otras, pero es una enfermedad que puede ser muy grave. Al final conlleva problemas cardiovasculares, diabetes… que producen un deterioro grave de la salud. Y a veces parece que está aceptado por la sociedad como algo normal. Debe preocuparnos y mucho.

—¿Afronta ese problema en su consulta?
—Sí, pero cuando vienen ya lo hacen con la idea de que ya quieren cuidarse, que lo que están haciendo no les está llevando por el buen camino. Lo malo es que vienen cuando han recibido ciertas noticias, un análisis de rutina o el descubrimiento o agravamiento de una enfermedad. Entonces quieren cuidarse. A veces vienen en un estado de patología bastante agravada por los años de sobrepeso u obesidad, y llegan asustados. Es cuando verdaderamente se ponen manos a la obra. Si no llega a producirse la noticia no lo perciben como enfermedad. Por eso, mi papel es no sólo plantear unos hábitos de alimentación, sino hacer ver la importancia de una alimentación correcta, y de un peso adecuado a la edad y actividad.

—¿Y los niños?
—En los niños cada vez hay más casos de obesidad. La prevalencia es mayor. Me vienen padres con niños con sobrepeso, que son carne de cañón para desarrollar enfermedades cardiovasculares. Cuando empieza a desarrollarse en la pubertad puede desembocar en una enfermedad mental más grave por verse con sobrepeso y no pertenecer al grupo de otros niños de su edad mejor vistos estéticamente. El responsable normalmente es el ambiente familiar. Ahora nos preocupamos de que en el colegio se dé la alimentación más equilibrada posible, pero si cuando llega a casa los hábitos no son saludables, al final sirve de muy poquito. La industria alimentaria es muy perversa. Cada vez se come peor, alimentos precocinados y poco saludables, con tal de vender. La legislación va por detrás de la industria, que nos vende productos poco saludables. La obesidad infantil tiene cada vez más incidencia, con graves trastornos orgánicos y con respecto a la estética, que puede desarrollar patologías mentales que pueden desembocar también en anorexia o bulimia.

—En esa relación entre el trastorno de la alimentación y conducta, ¿qué ocurre antes? ¿Hay relación de causa-efecto?
—Insisto en el papel fundamental de la psiquiatría y psicología porque son problemas de principio psiquiátricos, cuya semilla suelen ser problemas familiares desde edades muy tempranas. Personas que viven en ciertos ambientes familiares empiezan a desarrollar patologías psiquiátricas, que pasado el tiempo desembocan en una mala relación con la alimentación. La consecuencia es una conducta alimentaria anómala. Pero vienen de raíz familiar. Por ejemplo, los casos de anorexia pueden venir de madres muy controladoras y manipuladoras sobre sus hijos, sobre todo chicas. Cuando empiezan a desarrollarse son niñas con autoestima muy baja, que no controlan prácticamente nada, y una de las cosas que controlan es la alimentación de una forma anormal.

—¿Cómo se coordina con los psiquiatras?
—Mi papel es secundario respecto a la práctica psiquiátrica. Cuando SAMU Wellness me ofreció formar parte de su equipo vi el cielo abierto porque es una práctica que no puedo hacer en mi consulta. Necesito un equipo de psiquiatras en los que me voy a apoyar. Mi papel es el de dotar al paciente de las herramientas para que cambie sus hábitos alimentarios. El psiquiatra o psicólogo no ahonda sobre esos hábitos, sino sobre lo que le está produciendo la enfermedad psiquiátrica, y mi papel es reeducar al paciente. Por ejemplo, en la bulimia reeducar al paciente que ha perdido los hábitos correctos o no los sabe ver. Reeducar y pautarle dietas que vayan en consonancia a la recuperación.

—¿En qué momento debe empezar a preocupar una determinada alteración de las pautas de alimentación?
—Normalmente cuando se observa que la relación con la comida empieza a modificarse empezamos a sospechar. Cuando la persona se aísla, debemos sospechar muchísimo más. Si no quiere relacionarse con otras personas, y la comida forma parte de un tabú, no quiere hablar de comida o compartirla con nadie, empezamos a sospechar que la conducta de alimentación se está viendo trastocada.

—¿Qué debemos hacer?
—Tengo padres que han venido con ese problema, y yo siempre aconsejo derivarlo a los médicos, para que estos lo deriven en su casa a una unidad de salud mental. Un especialista en psiquiatría que evalúe y valore esa pauta de actuación. Yo soy experto en estas terapias, pero mi papel es puramente alimentario. Aunque pueda detectar el problema, mi función es derivarlo al médico con un informe para que tome cartas en el asunto y vaya a la unidad de salud mental si es necesario.

yoga samu wellness

Una jornada cualquiera en el Hospital de día

Dentro de la planificación de actividades ocupacionales del hospital de día, en nuestra clínica SAMU Wellness Miguel de Mañara trabajamos para orientar a los usuarios hacia los beneficios del ejercicio físico y la conexión entre cuerpo y mente. Por eso, cada mañana arranca con el área deportiva Activatek, siempre adaptándonos a las necesidades personales de nuestros pacientes, bajo el marco de su plan terapéutico personalizado y con la guía de la fisioterapeuta del equipo.

En este espacio realizamos talleres de yoga y pilates que complementamos con dinámicas de relajación y aprendizaje de nuevas herramientas de permiten a los usuarios hacer frente a situaciones de crisis por ansiedad o angustia.

A continuación, desarrollamos talleres de composición y de recital, donde el objetivo es la libre expresión de emociones. Así, creamos un espacio de motivación por los nuevos aprendizajes teniendo presente el abordaje del miedo a la exposición ante a otros compañeros. Estas herramientas nos permiten facilitar la integración de cada persona en el grupo.

Tras este punto de partida, comienza el día a día de nuestros usuarios, que asisten a terapias individuales y grupales, bajo un abordaje terapéutico sistémico y multidisciplinar.

De forma complementaria realizamos salidas terapéuticas semanales. En estas sesiones  nos marcamos como objetivo el conocimiento y descubrimiento de la cultura de nuestra ciudad. La idea es nutrirnos de la historia que nos rodea para generar curiosidad, fomentar alternativas a pensamientos negativos y recurrentes, y facilitar nuevos aprendizajes y estilos de vida. Bajo este paradigma orientamos nuestras intervenciones hacia el bienestar emocional, la recuperación de la autonomía y la ampliación de nuevas fórmulas de relación en el desarrollo de nuestros tiempos de ocio.

El funcionamiento de estas actividades, desde su propia planificación, se convierte en parte del plan terapéutico personalizado de cada paciente. Cada semana nos reunimos para hacer una programación en la que incluimos una gran variedad de propuestas para las salidas. Los mismos pacientes ofrecen sus sugerencias después de una previa búsqueda de información, exponiendo y gestionando cada actividad.
Realizamos numerosas actividades y salidas, y así logramos que los usuarios disfruten de la observación, de las explicaciones de la historia del arte en museos y en exposiciones. En ocasiones, ellos mismos  se convierten en guías.

Trabajamos la mejora de las habilidades sociales y las relaciones interpersonales. Fomentamos la autoestima creando un clima de seguridad con nuestro acompañamiento. Y potenciamos los recursos personales, generando nuevos espacios que faciliten la autonomía e independencia de cada persona.

Además, alternamos el ocio y cultura con el conocimiento de nuevas formas de gastronomía, a fin de fomentar habilidades de la vida diaria que repercutan de forma positiva en su autonomía personal e independencia. Así hemos realizado visitas a restaurantes donde nos ofrecen una guía gastronómica y orientación sobre nuevos hábitos de vida saludables.

Una vez terminada la programación, realizamos una evaluación como parte del propio programa, en la que repasamos los objetivos y metodología empleada para reformular propuestas con ideas y sugerencias. A través de estas actividades dinámicas fomentamos transversalmente un nuevo entrenamiento de la mente, focalizando el pensamiento presente en el aquí y ahora al objeto de mejorar la calidad de vida emocional de nuestros usuarios.