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Trabajo y futuro: el sueño de Issa y El Mehdi

Cuando eran unos críos, El Mehdi Zekrauoi e Issa Bakayoko dejaron atrás a su familia, sus amigos y su tierra para buscar su futuro en España. Encontraron un hogar y una nueva familia en el centro de acogida Miguel de Mañara, gestionado por Fundación SAMU en Montequinto (Sevilla), donde aprendieron un oficio y se esfuerzan por integrarse plenamente en la sociedad.

Los centros de Fundación SAMU como el de Miguel de Mañara disponen de un programa de inserción sociolaboral que se aplica a los menores a quienes les falta un año para cumplir la mayoría de edad. En la primera fase, los educadores les ayudan a preparar su currículum, simulan las entrevistas de trabajo y les dotan de herramientas para buscar un empleo.

La segunda fase es, según Alejandro Cala, coordinador del centro de Miguel de Mañara, la más importante: se trata de encontrar unas prácticas teniendo en cuenta la formación y las preferencias laborales del menor. Después, se realiza un seguimiento que permite comprobar el progreso del menor y las posibilidades de una futura incorporación al puesto de trabajo.

“Debido al problema de los permisos de residencia no lucrativos [la imposibilidad de que el menor trabaje mientras no cumpla la mayoría de edad], la importancia de las prácticas para nuestros chicos es enorme. Facilita mantener un contacto con la empresa hasta que, si todo es favorable, se considera la posibilidad de contratación, y después, se resuelve en Extranjería el permiso de trabajo”, comenta Sofía Álvarez, trabajadora social del centro.

Issa Bakayoko es uno de los Menas que han podido beneficiarse de este programa. El joven llegó a España en mayo de 2018 y, pese a la dificultad de adaptarse a otro idioma y otras costumbres, explica que estos meses han sido mucho mejores que los que vivió en su país y en su periplo que lo trajo desde Costa de Marfil. “Por lo menos estoy en Europa”, dice. Sus padres pagaron su viaje y eso, para estos chicos, puede ser una presión añadida. Deben responder a las expectativas de aquellos que quedaron atrás.

Ahora Issa se prepara para ser electricista. Ya ha realizado unas prácticas de cinco meses en una empresa local, donde dejó una impresión inmejorable: “Mi jefe me lo puso muy fácil para que aprendiera el oficio, y yo desde el principio me he sentido muy cómodo con él. Se ha convertido en un gran amigo”, relata. Todo parece indicar que será contratado en esta empresa en cuanto cumpla la mayoría de edad. De hecho, ya dispone de la oferta de trabajo.

Para estos jóvenes, el futuro representa algo más concreto y palpable que lo que pueda ser para un chico español de su edad. Si no tienen una oferta de trabajo un año después de cumplir los 18, se decretará su expulsión del país. Sin embargo, Mehdi lo tiene claro: “No me preocupa la mayoría de edad, sé que voy a conseguir un trabajo y un piso donde pueda vivir con mis amigos”.

De momento, y tras formarse, está acumulando experiencia: ha realizado prácticas de ayudante de cocina en un restaurante y en una cafetería, y, gracias al trabajo del servicio de orientación laboral de su centro, ahora está realizando prácticas de camarero.

“Los primeros meses en España fueron malos. No sabía hablar español, echaba de menos a mi familia y no conocía las costumbres de aquí, que son muy diferentes a las de Marruecos. Pero con esfuerzo me adapté. No me costó mucho trabajo aprender español porque tenía ganas de comunicarme con la gente”, señala Mehdi, que en mayo cumple la mayoría de edad.

Ambos jóvenes están más cerca que nunca de lograr su sueño, el mismo que persiguen todos los menores que llegan a Europa buscando lo que en sus países a veces no tienen: un trabajo y un futuro.

Menas

Menas en Dúrcal: La educación como parte de la migración

En el Centro de Atención Inmediata (AI) SAMU Dúrcal trabajamos desde el convencimiento de que la educación es la herramienta clave para el desarrollo integral de nuestros menores acogidos. Con la educación no sólo nos referimos a la formal, la que es planificada y reglada, la que conocemos como enseñanza obligatoria y postobligatoria. También nos referimos a la educación no formal, una educación organizada pero no totalmente institucionalizada, la que tiene lugar en un contexto extraescolar. Una educación complementaria, opcional y flexible.
El acceso a la educación, un derecho fundamental, constituye, en el caso de los menores, un paso clave para su integración en el país de acogida, y una de las vías de promoción social y laboral.

Los proyectos migratorios de nuestros menores tienen un denominador común: mejorar su vida y la de sus familiares a través de su inserción laboral. Si bien es cierto que el colectivo Menas, Menores Extranjeros No Acompañados, comparte características en cuanto al periodo evolutivo al que pertenece, países de origen, etcétera, no se puede considerar un grupo homogéneo. Los menores acogidos presentan características individuales que requieren una intervención individualizada.

En cuanto a la educación formal, los menores acogidos en el centro de AI Dúrcal presentan diferencias significativas. Una de las principales es el nivel de educación alcanzado en el país de origen. En la mayoría de los casos, nuestros menores han tenido una vida académica marcada por un fuerte absentismo escolar. Otra diferencia significativa está en la construcción de los proyectos migratorios. La mayoría de las migraciones son concebidas como migraciones laborales no académicas.

Ante esta situación, uno de los retos del equipo educativo del centro es lograr que nuestros menores tomen conciencia de que la educación es la base de cualquier proyecto migratorio. Y con esta premisa se trabaja desde el primer día de acogida.

Tras el ingreso de un menor, automáticamente es escolarizado en el Centro Público de Educación de Personas Adultas Valle de Lecrín, en el municipio de Dúrcal, Granada, para recibir, de lunes a viernes, clases de español por parte del profesorado perteneciente a ATAL y del profesorado propio de dicho centro.

Las Aulas Temporales de Adaptación Lingüística (ATAL) son programas de acogida y de enseñanza del español dirigidas a la integración del alumnado de origen extranjero con desconocimiento de la lengua y que garantizan la escolarización de los menores inmigrantes permitiendo su incorporación a los ritmos y las actividades de aprendizaje del nivel educativo correspondiente a su edad.

Nuestros profeses de ATAL, Manuel Morales Martín y Antonia María Torres Martos, son los encargados de esta labor desde septiembre de 2018. Es el profesorado de referencia de nuestros menores el que, en comunicación con el equipo educativo y directivo del centro, plantea los objetivos y es el encargado de la evaluación continua y la evaluación final previa, y de la determinación de la derivación de los menores a los Institutos de Educación Secundaria.

El profesado del Centro Público de Educación de Personas Adultas Valle de Lecrín, formado por Concepción Toquero Lupión, Esther Garzón Artacho y Antonio García Villena, complementa de manera encomiable la labor del profesorado de ATAL, siendo liderado por su director Eloy Roldán Aguilera.

Éste es el itinerario por el que han pasado todos nuestros menores. Hasta la fecha, en la unidad de AI Dúrcal se han matriculado un total de 30 menores en los institutos de los municipios de Dúrcal y Padul.

En la actualidad, 13 se encuentran escolarizados. Tres de ellos lo hacen en el IES Valle de Lecrín y dos en el IES Alonso Cano, ambos en el municipio de Dúrcal. Otros ocho menores se encuentran escolarizados en el IES La Laguna del municipio de Padul, Granada.

El resto han sufrido bajas por derivaciones a diferentes COISL (Centro Orientación Inserción Social Laboral), derivaciones por mayoría de edad y por abandonos voluntarios del centro.

Nuestros jóvenes sueñan con una vida mejor, y para conseguirlo, han llegado a la primera etapa, la educación. Algunos de nuestros ejemplos son: Fassine Camara, natural de Guinea, que cursa 4º de la ESO y cuyo sueño, desde la infancia, es ser profesor. Alhassan Diallo, de Guinea Conakry, cursa 4º de la ESO, y su sueño es ser sociólogo o trabajador social. Mohamed El Jedaoui, de Marruecos, cursa 4º de la ESO y también sueña con ser profesor. A Mohamed Mallouli, de Marruecos, que cursa 4º de la ESO, le encantaría dedicarse a la restauración. Éstos son solo algunos ejemplos.

Nuestros menores están viviendo, de una manera u otra, la experiencia de seguir construyendo su historia de vida. La escolarización está suponiendo para ellos una experiencia personal que va más allá de la adquisición de competencias. Está siendo una oportunidad para su educación en valores del país de acogida, una manera de relacionarse con otros adolescentes, ampliando así su red social. En definitiva, una experiencia intercultural enriquecedora.

No menos importante para nuestro centro es la educación no formal. El centro ofrece a los menores un amplio abanico de actividades extraescolares a las que acuden semanalmente. Los menores acuden todos los jueves a un curso de Iniciación a la Informática en el Centro Guadalinfo, donde se potencia el uso de las TICs como herramienta de aprendizaje. Otro grupo de menores acude a clases de inglés. Dentro de esta oferta formativa también contamos con la Asociación VALE, situada en nuestro municipio, donde algunos menores acuden semanalmente a una Batucada Inclusiva dirigida por el grupo BloCo Suca, cuyo objetivo es crear un espacio de ocio compartido entre personas diversas, fomentando la solidaridad y el respeto por la diferencia.

También hay tres menores que participan todos los jueves en un taller de cerámica dirigido por Miguel Ángel Lorente Fernández y desarrollado en las instalaciones de la Asociación VALE de Dúrcal.

La unidad de AI Dúrcal ha conseguido esta oferta formativa fruto del esfuerzo del equipo de SAMU Dúrcal y contando con la colaboración de los municipios colindantes y con el tejido asociativo. Sólo así podremos avanzar en la inclusión de nuestros menores en su país de acogida, garantizando su participación comunitaria de manera activa.

 

Autor: Siham Khalifa El Abdi. Auxiliar Técnico Educativo de la Unidad de Atención Inmediata SAMU Dúrcal.

 

Said, el pichichi de Arcos

El Patronato Municipal de Juventud y Deportes de Arcos de a Frontera (Cádiz) organiza cada año la Liga Local de Fútbol 7, en la que esta temporada 2018-2019 han jugado un total de 9 equipos de la localidad, entre ellos SAMU Arcos, un grupo formado por menores entre 14 y 17 años del centro de Atención Inmediata SAMU Arcos. La implicación y técnica de este equipo en el campeonato han sido tan grandes que uno de sus jugadores se ha alzado como pichichi de la liga: Yasaid Koakau, un joven de 17 años natural de Costa de Marfil que, gracias a su destreza con el balón, ha sido seleccionado recientemente para jugar en el C.D. Jédula.

“En el primer momento que vi tocar el balón a Said supe que este chico tenía talento, era especial”, comenta Gonzalo, entrenador de SAMU Arcos. “Es un jugador con mucha técnica y regate en el uno contra uno, que destaca por su gran velocidad. Ha conseguido un total de 18 dianas en 16 encuentros, dos de los cuales no pudo disputar por una lesión. Esta cifra es bastante buena teniendo en cuenta que Said, por circunstancias de los partidos, ha retrasado su posición al mediocampo en numerosas ocasiones para poder ayudar al equipo en la salida del balón, no pudiendo jugar así de delantero”, continúa el míster. “En lo personal, Said es un chico ejemplar, es muy buen compañero y tiene muy claro su objetivo en España: ser jugador profesional. Por ello y por su talento, decidí contactar con el entrenador del C.D. Jédula para ofrecerle la oportunidad de realizar unas pruebas y poder así abrirse puertas en el fútbol profesional. Estoy muy feliz por ello”.

Said nació en Bouaké, una de las ciudades más grandes de Costa de Marfil, pero poco después se mudó con su familia a San Pedro, donde empezó a jugar al fútbol en la calle. Tenía seis años. En 2009 falleció su padre y se fue a vivir con su hermano mayor a la capital, Yamusukro, donde jugó por primera vez en un equipo profesional.

“Ahora juego de delantero, pero en mis comienzos, cuando era pequeño, jugaba de defensa porque me gustaba mucho Kolo Toure, un exfutbolista marfileño que entonces jugaba en el Arsenal. Poco a poco empecé a jugar de extremo, en la banda derecha, porque me encantaba ver jugar a Cristiano Ronaldo. Me gustaba su velocidad, su técnica y su regate, yo quería ser como él”, explica el joven. “Me siento muy feliz por la oportunidad que me han dado en el C.D Jédula aunque estoy un poco triste porque aún no he podido jugar ningún partido oficial con el equipo. Para poder hacerlo tengo que federarme y para eso necesito la documentación y legalizar mi situación en España. Por ahora solo he podido entrenar con el C.D. Jédula. No obstante, sé que esto es positivo para poder tener una mejor preparación física pero quiero jugar con ellos”.

El equipo SAMU Arcos ha acabado quinto en la clasificación con 21 puntos, a 19 del último, un gran éxito si se tiene en cuenta que todos los jugadores del resto de equipos son mayores de edad (requisito para jugar en esta liga pero que con los jugadores de SAMU el Ayuntamiento hizo una excepción para fomentar su integración en el municipio), y que los jugadores no son fijos. “Cada semana hemos tenido que ir adaptándonos a la disponibilidad de nuestros jugadores supliendo las bajas por nuevos menores que llegaban al centro y que mostraban interés en participar”, explica el entrenador del equipo. Pese a este hándicap, SAMU Arcos ha contado con una gran aceptación entre el público, tanto que un grupo de menores de la localidad crearon un club de fans que acompañaba y animaba con cánticos y pancartas cada semana al equipo de Said, celebrando sus goles como si de la Champions League se tratase.

Residencial Básico El Bosque SAMU menas

El primer contrato de Ismael Yazidi

Empujado por la necesidad de su familia y con la firme idea de cambiar su destino lejos de la tierra que lo vio crecer (Beni Melal – Marruecos), Ismael Yazidi llegó a las costas de Tarifa a finales de 2017, con sólo 16 años. Tras pasar por diferentes centros de menores, Ismael finalmente se estabilizó en el Residencial El Bosque, en Pelayo (Algeciras), donde comparte alojamiento con otros 30 menores.
De carácter tímido e introvertido, siempre ha destacado por su amabilidad, predisposición al trabajo, colaboración y respeto hacia sus compañeros y educadores. Hoy por hoy, constituye uno de los pilares de nuestro centro y es un ejemplo a seguir por los menores recién llegados, a los que recibe con agrado y ayuda en su proceso de adaptación.

El buen hacer de Ismael ha quedado patente en su primer período de prácticas en el área de hostelería y restauración donde, una vez más, ha demostrado la importancia de la voluntad, el empeño y la constancia con la que este chico persigue su objetivo: formarse para conseguir un trabajo cuando le llegue el momento de abandonar el centro en su mayoría de edad.

“Para eso vine a España y mi objetivo está cada vez más cerca. No se puede perder el tiempo en otras cosas. Se trata de trabajar y aprovechar las oportunidades que nos ofrecen. Siento que la recompensa a mi esfuerzo y el de mi familia, llegará más pronto que tarde”, enfatiza Ismael. Y tanto es así que, tras finalizar sus prácticas, José (empresario y dueño del establecimiento que emplea a Ismael), se ha comprometido a ofrecerle su primer contrato de trabajo. Compromiso que, con tremendo orgullo y merecido esfuerzo por su parte, queremos compartir con los lectores y compañeros de SAMU en este artículo, mostrando el instante en el que se materializa la firma de su precontrato.

Como Ismael, son muchos los menores de nuestro centro que actualmente desarrollan programas de inserción laboral en pequeñas y medianas empresas de la zona, hecho que perfila un horizonte esperanzador para nuestros chicos y que da sentido a su decisión de emprender el camino hacia Europa en la búsqueda de un futuro digno para ellos y sus familias.

Me gustaría aprovechar estas líneas para agradecer y ensalzar la encomiable labor de mis compañeros del Residencial Básico El Bosque, quienes día a día demuestran su compromiso en la defensa y continua construcción de la profesión, la cual está dando unos resultados excepcionales en términos de inclusión escolar, social y laboral de los menores que están bajo nuestra responsabilidad.

Autor: Jesús Pérez López

 

El psicoanalista Juan J. Martínez Ibáñez , en el congreso de SAMU sobre el apego

“El apego no es una cuestión de amor, sino de supervivencia”

Fundación SAMU celebró el 18 de octubre en el salón de actos de la Fundación CEU San Pablo Andalucía en Bormujos (Sevilla) la I Jornada Científica El apego como vinculo afectivo, un congreso dirigido a profesionales que trabajan en la atención a menores y que reunió a especialistas de todo el país para ofrecer una formación de primer nivel sobre el apego y su trascendencia en el desarrollo emocional de niños y adolescentes.

La jornada, que contó con la colaboración de la Consejería de Igualdad y Políticas Sociales, el Colegio Oficial de Psicólogos de Andalucía Occidental y SAMU Wellness, arrancó con la conferencia inaugural del psicólogo clínico, psicoanalista y psicoterapeuta relacional Juan J. Martínez Ibáñez, que habló sobre El funcionamiento mental y el trastorno de apego reactivo.

“Somos seres que si no nos cuidan, nos morimos, y no sólo cuando somos bebés”, destacó Martínez Ibáñez, miembro de la Sociedad Española y de la Sociedad Británica de Psicoanálisis. “Existe la creencia de que cuando los niños pequeños son criados en instituciones, éstos tienen oportunidades limitadas de formar vínculos afectivos y los padres adoptivos, a menudo, se quejan de serias perturbaciones de apego en los niños que han adoptado de las instituciones. Lo cierto es que cuando los cuidadores ignoran las necesidades de los niños o les molestan que existan, estos niños aprenden a anticipar el rechazo”, continuó. “Los niños abandonados manejan lo mejor que pueden esa situación, bloqueando la hostilidad o el abandono de su madre como si no les importara, pero es probable que su cuerpo permanezca en un estado de alerta elevado, preparado para recibir los golpes, la privación o el abandono”.

Tras la conferencia inaugural se desarrollaron diferentes ponencias, debates, mesas redondas y exposiciones de casos prácticos en los que participaron, entre otros, el psiquiatra Sebastián Girón García, que abordó el apego según el modelo relacional sistémico.

“Cuando un hijo, principalmente adolescente, no se deja cuidar o educar por sus padres es porque existe un daño en el vínculo de apego. Estos padres no han estado disponibles cuando él los necesitó y no le han proporcionado de niño la seguridad que él requería. Ahora, el joven recibe esa educación como un ataque a su ser, a su intimidad, y su actitud es más rebelde”, señaló Girón durante su intervención. “Un cuidador suficientemente bueno para proporcionar a un menor una base de seguridad debe ser predominantemente sensible, empático, responsivo y constante”.

En la jornada, que se desarrolló desde las nueve de la mañana hasta las siete y media de la tarde, también participaron otros profesionales como el psicólogo y terapeuta familiar Andrés Pérez Rúa; la psicóloga Natalia Seijo Ameneiros, del Centro de Psicoterapia y Trauma Natalia Seijo Ferrol; la profesora de la Universidad de Sevilla Maite Román Rodríguez; la psicoterapeuta Ana Morales Martínez; el educador social Antonio Reina Chamorro; y la consultora en infancia, afectividad y protección de la entidad Espirales Pepa Horno. Esta psicóloga desarrolló su ponencia basándose en La afectividad consciente como competencia profesional e hizo hincapié en que “el ser humano tiene dos necesidades universales: sentirse amado y sentirse seguro”. “El apego no es una cuestión de amor, es una cuestión de seguridad y supervivencia. La gente prefiere tener poco apego a no tenerlo, prefiere tener una familia en la que le tratan mal a no tenerla”, comentó durante su intervención.

El doctor Zoilo Fernández, director técnico de SAMU Wellness, fue el encargado de cerrar el evento y entre sus conclusiones destacó las carencias en el ámbito del apego en las instituciones dirigidas a menores y sus repercusiones en el desarrollo y adaptación del menor en la sociedad en el futuro, así como el desconocimiento de los trastornos de apego en el ámbito de la asistencia social, sanitaria, jurídica y educativa y la necesidad de formación en espacios como éstos.

Fernández también señaló la necesidad de trabajar con los padres adoptivos con el fin de construir relaciones basadas en la seguridad como motor del cambio de los menores y la importancia de trabajar en red para el avance y evolución del apego.

El equipo organizador considera un éxito haber podido encontrar un equilibrio entre un auditorio tan variopinto, ofreciendo formación y conocimientos de calidad a un sector del público formado por recién graduados o personal con poca experiencia en el apego, y experiencias de gran interés a otro sector del público formada por profesionales con una larga trayectoria en este ámbito. Las evaluaciones que se realizaron entre los asistentes al concluir la jornada técnica mostraron un grado de satisfacción del 87%, lo que anima a pensar en futuras ediciones.

Abel Agbo Cádiz Fútbol Club

El sueño de Abel

La guerra, el hambre y el sueño de ser futbolista y labrarse un futuro llevaron al joven Neva Avit Abel Agbo, más conocido como Abel, a marcharse de su país natal, Costa de Marfil, dejando allí a su familia. Hoy, tres años después, en los que ha sufrido estafas, penurias y un viaje en patera por el Estrecho de Gibraltar, tiene su sueño un poco más cerca: ser futbolista. El joven, que ha vivido varios meses en el centro de menores de acogida de SAMU Miguel de Mañara, en Sevilla, ha sido fichado por el Cádiz Club de Fútbol, donde ya entrena con el equipo de juveniles.

Desde pequeño Abel soñaba con ser futbolista. Un día, un supuesto ojeador vio sus habilidades y le ofreció ir a un centro de formación de fútbol en Marruecos, según cuenta el joven. “En mi país estábamos en guerra y mi madre no tenía dinero para mandarme a Marruecos, pero un tío mío me dijo que él me ayudaría. Pagó el billete a Marruecos y la inscripción en el centro. Cuando llegamos a Marruecos me di cuenta que me habían estafado, a mí y a otro chico más. No había ningún centro de formación y se habían quedado con el dinero. Yo tenía 14 años”, recuerda. “Sobreviví como pude en Tánger. Trabajé en todo lo que me salía para poder comer y un día, un grupo de chicos y yo decidimos poner cada uno 50 euros y comprar una patera para cruzar el Estrecho de Gibraltar y llegar a España”.

Abel recuerda el viaje como “una auténtica pesadilla”. “Yo solo pensaba: Dios está contigo, saldrás de ésta”, relata el joven, que en diciembre cumple 18 años.

A su llegada a Tarifa, primero le enviaron a un centro de acogida de Alcalá de Guadaíra, luego a otro de Sanlúcar la Mayor, y, por último, al centro Miguel de Mañara de SAMU, en Dos Hermanas, donde ha permanecido cerca de un año. “El centro de SAMU es el mejor en el que he estado. Allí me han ayudado a sacarme un diploma de Ayudante de Cocina en el IES Pino Montano y ahora iba a empezar a hacer prácticas. Ya no pensaba en el fútbol, sólo en formarme y trabajar para poder enviarle dinero a mi madre”.

Pero el deporte siempre ha marcado de algún modo su vida. El pasado año estuvo en la Escuela de Fútbol Antonio Puerta-Nervión pero, al no estar regularizada aún su situación en España, no pudo disputar partidos oficiales. El club de fútbol de Tomares también estuvo interesado en él, pero finalmente ha optado por el Cádiz Club de Fútbol. “Yo voy donde me mande Dios y ahora me ha mandado a Cádiz. Aún falta solucionar algunos trámites administrativos con la Junta de Andalucía, porque soy menor de edad, pero ya estoy viviendo con otros jugadores del club y entrenando con el equipo de juveniles”.

“Estoy muy contento, nunca pensé que podía conseguir lo que tengo ahora”, confiesa Abel, que reconoce que quiere ser jugador profesional y “ayudar a los niños que viven en orfanatos y a mujeres viudas sin recursos y con hijos”.

I Jornada Científica El apego como vinculo afectivo

Sevilla acoge una jornada de primer nivel sobre el apego y su trascendencia en el desarrollo emocional de los niños

La Fundación SAMU, en colaboración con la Consejería de Igualdad y Políticas Sociales de la Junta de Andalucía, la Fundación CEU San Pablo Andalucía, el Colegio Oficial de Psicólogos de Andalucía Occidental y la clínica de salud mental SAMU Wellness, organiza el 18 de octubre en Sevilla la I Jornada Cientí­fica El apego como vinculo afectivo. Experiencias profesiones en el trastorno reactivo del apego en la infancia y adolescencia. 

Esta jornada, dirigida a todos los profesionales que trabajan en la atención a menores, reunirá a especialistas de todo el país para ofrecer una formación de primer nivel sobre el apego y su trascendencia en el desarrollo emocional de niños y adolescentes.

Los ponentes ofrecerán distintas experiencias en intervenciones profesionales, además de transmitir a los participantes sus conocimientos sobre la importancia de la Teoría del Apego en los contextos psicoterapéuticos, y asesorarles en su relación cotidiana con los jóvenes.

La jornada, que se celebrará el jueves 18 de octubre de 9:00 a 19:30 en el salón de actos de la Fundación San Pablo Andalucía CEU en Bormujos (Sevilla), arrancará con la conferencia inaugural del doctor Juan José Martínez Ibáñez, psicólogo clínico, psicoanalista y psicoterapeuta relacional, que hablará del Funcionamiento mental y el trastorno de apego reactivo. 

A lo largo de la jornada se desarrollarán diferentes conferencias, debates, mesas redondas y exposiciones de casos prácticos en los que participarán, entre otros profesionales, Sebastián Girón García, psiquiatra del Centro de Tratamiento Ambulatorio de Drogodependencias de Cádiz; Pepa Horno Goicoechea, consultora en infancia, afectividad y protección de Espirales Consultoría de Infancia; el psicólogo y terapeuta familiar Andrés Pérez Rúa; la psicóloga Natalia Seijo Ameneiros, del Centro de Psicoterapia y Trauma Natalia Seijo Ferrol; la profesora de la Universidad de Sevilla Maite Román Rodríguez; la psicoterapeuta Ana Morales Martínez; y el educador social Antonio Reina Chamorro, que cerrará el encuentro con la ponencia No basta con quererles.

Esta jornada científica sobre el apego y su trascendencia en el desarrollo emocional de los niños nace con una clara vocación de convertirse en un encuentro anual de referencia para los profesionales, empresas e instituciones que trabajan en atención a la infancia.

La Fundación SAMU es una entidad de carácter fundacional sanitario que persigue la consecución de fines de interés general sin ánimo de lucro en España, y en especial en Andalucía. Nació hace más de una década con el claro objetivo de impulsar la igualdad de oportunidades de los colectivos más vulnerables, desarrollando un conjunto de servicios integrados destinados a mejorar la calidad de vida de las personas gravemente afectadas con discapacidad.

 

Día y hora: Jueves, 18 de octubre de 9:00 a 19:30

Lugar: Salón de Actos Fundación San Pablo Andalucía CEU. Glorieta de Ángel Herrera Oria, s/n 41930 Bormujos (Sevilla)

Más información e inscripciones: www.samucongresos.es y en el teléfono 682 33 73 25

Grupo SAMU

Grupo SAMU: Nuevo cursos, nuevos retos

SAMU empieza un nuevo curso con todo el impulso de una organización definida por su director general como “una gran fuerza del bien”. Con optimismo renovado, afrontamos el último tramo del año lleno de nuevos proyectos.

En lo que llevamos de año, y especialmente este verano, SAMU ha afrontado con éxito un enorme reto: liderar la respuesta a la llegada masiva de niños a nuestras costas. Esto ha exigido un esfuerzo logístico sin precedentes, con la movilización de un equipo de más de doscientas personas.

Según cifras oficiales de la Junta de Andalucía, hasta agosto llegaron a nuestros puertos más de 28.000 personas, de las cuales 4.000 eran menores no acompañados. De ellos, alrededor del 55% ingresaron en un centro SAMU. En este periodo, SAMU ha abierto más de 15 recursos y acoge ahora a más de 600 chicos marroquíes y subsaharianos en riesgo extremo de vulnerabilidad.

Para los que formamos parte de SAMU es un gran orgullo que nuestra entidad esté a la cabeza del esfuerzo solidario de España y Andalucía, como referencia de calidad en la prestación de servicios de acogida. Queremos destacar la importantísima labor que ha llevado a cabo todo nuestro equipo de menores y de administración para hacer frente a las sucesivas oleadas y crisis migratorias.

Además de ello, el curso 2018-2019 nos traerá tres importantes novedades en la modernización de SAMU: en primer lugar, culminará la implantación del plan de igualdad que prevé, entre otras mejoras, potenciar la conciliación y contar con un Consejo de Dirección paritario, que supondrá incorporar un nuevo caudal de talento directivo imprescindible para mejorar como institución.

En segundo lugar, SAMU se adherirá a los Objetivos de Desarrollo Sostenible 2020, una iniciativa de Naciones Unidas en la lucha contra la desigualdad y la preservación del planeta. Para su implantación, se creará una nueva Dirección de Sostenibilidad en este trimestre. Por último, en 2019 se implantará el nuevo Plan de Innovación que se está ultimando y que prevé el desarrollo de tecnología y sistemas de gestión propios.

Si continúa el mismo ritmo de crecimiento, se prevé que en pocos meses superaremos la cifra de 1.000 personas trabajando en nuestra entidad, lo que es un motivo de satisfacción y responsabilidad como una de las entidades líderes en la prestación de servicios sociales en toda España.

En el panorama internacional, prevemos que 2019 sea el año de la consolidación de SAMU Marruecos como una entidad puntera en los servicios de emergencias en el país vecino. También se está potenciando el lanzamiento de SAMU Foundation con sede en Washington DC, Estados Unidos.

En el plano científico, el 18 de octubre se celebrarán las Jornadas del Apego Infantil como Vínculo Afectivo, dirigidas a los profesionales que trabajan con menores. Esperamos recibir a los mejores profesionales de nuestro país en este campo.

SAMU sigue avanzando como una entidad respetada gracias al prestigio de nuestros profesionales, que son los protagonistas de la atención a las personas que dependen de nosotros.

El equipo directivo de SAMU

Proyecto Voluntariado Intergeneracional: cuando los usuarios de Santa Ana prestan ayuda

La Residencia Santa Ana de la Fundación SAMU, que atiende a personas gravemente afectadas con daño cerebral sobrevenido, ha puesto en marcha el proyecto Voluntariado intergeneracional, una iniciativa que convierte a estas personas en prestadores activos de ayuda a terceros en lugar de ser receptores de esa ayuda, fomentando su compromiso social y su autoestima.

A través de este proyecto, los responsables del centro pretenden crear “contextos integradores” que faciliten la inclusión de las personas residentes en la vida social, en este caso, planificando un marco desde el “aprendizaje servicio”. Esta fórmula consiste en prestar un servicio solidario destinado a atender necesidades reales y sentidas de una comunidad, y que en este caso se ha concretado en un voluntariado con personas mayores usuarias de una Unidad de Estancia Diurna (UED).

Los participantes en el Voluntariado intergeneracional abordan desde el planteamiento del proyecto (detectando necesidades y realizando propuestas) a la evaluación (reflexionando sobre la intervención y su mejora), articulando procesos de reflexión, trabajo colaborativo y competencias para la ciudadanía.

“El aprendizaje servicio es un proyecto con utilidad social. Es un reto de transformación de la realidad en el que se invierten los roles. Esta vez somos nosotros los que ayudamos, en este caso, a través de la realización de un voluntariado con personas mayores usuarias de una UED, prestando un servicio a la comunidad, favoreciendo la normalización, potenciando el sentimiento de utilidad y mejorando, en definitiva, su calidad de vida”, explica Cristina González-Valdayo Benítez, pedagoga de la Residencia Santa Ana.

González-Valdayo señala que la función del equipo con las personas mayores consiste en ofrecer apoyo a las actividades que ellos realizan dentro de su programación anual. “Nos ajustamos cada jueves a ellas, ayudándoles a realizarlas, dialogando con ellos y participando también en su realización. Los primeros días propusimos nosotros las actividades a través de dinámicas de presentación para conocernos e ir sentando las bases de comunicación y relación”, subraya.

Las actividades incluyen dinámicas de presentación, manualidades, estética y maquillaje, puzles, bailes, adivinanzas, conversaciones y apoyo en sus tareas, entre otras.

“El proyecto ha tenido una acogida entusiasta por parte de todos los participantes y su motivación ha contagiado a personas que en un principio no mostraron interés por participar. Los encuentros son cada vez más participativos y afectivos, fruto del afianzamiento en las relaciones sociales”, aplaude Gómez-Valdayo, que avanza que su equipo retomará este proyecto en septiembre.

La consejera de Bienestar Social de Castilla-La Mancha visita la residencia Santa Teresa

La consejera de Bienestar Social del Gobierno de Castilla-La Mancha, Aurelia Sánchez, visitó el 19 de julio la residencia para personas con discapacidad intelectual Santa Teresa de Villafranca de los Caballeros (Toledo), gestionada por Fundación SAMU, con el objetivo de conocer las instalaciones y el trabajo en uno de los centros más representativos del sector en la región.

La consejera de Bienestar Social estuvo acompaña del director general de Personas Mayores y Discapacidad, Javier Pérez; el director provincial de Bienestar Social en Toledo, Gregorio Gómez, y el alcalde de la localidad, Julián Bolaños, al que agradeció su acogida. “Estamos en un municipio que tiene unos recursos muy importantes para atender a los colectivos más vulnerables”, señaló.

La representante del Gobierno de Castilla-La Mancha realizó un recorrido por las instalaciones de la Residencia Santa Teresa y dedicó su tiempo a saludar a los chicos y chicas del centro, y a hacerse algunas fotografías con ellos. Todos recibieron esta ilustre visita con mucha ilusión y regalaron a los políticos objetos de artesanía que habían creado ellos mismos de forma previa a la visita, como una de las actividades más de su jornada.

Durante la visita, la consejera de Bienestar Social y sus acompañantes visitaron el huerto de la residencia, la clase de musicoterapia, el taller de laborterapia y las clases de gimnasia, que representan algunas de las actividades terapéuticas, formativas, de entretenimiento y de integración social que forman parte del programa de Santa Teresa.

Coincidiendo con la visita, Aurelia Sánchez destacó que “los datos de dependencia ya sitúan a Castilla-La Mancha en la senda de recuperación, con más de 54.000 personas incorporadas en el Sistema de Dependencia, 20.000 más en esta legislatura, y que tienen más de 65.000 prestaciones”.

La consejera celebró la intención del Gobierno de España de aprobar una ley para garantizar la capacidad jurídica de las personas con discapacidad, punto que ya está recogido en la ley de Protección y Apoyo Garantizado para Personas con Discapacidad en Castilla-La Mancha, recientemente aprobada.